miércoles, febrero 21, 2007

Yo confío...

"No es ese tu ángel?" preguntó un niño de cabellos castaños que se encontraba parado junto a un joven mayor, de unos 27 años, que tenía el cabello negro.
"N-no puede ser... Lynn?" balbuceó el joven
"Tranquilo Zach... no puede ser ella... o sí?" preguntó el niño... la respuesta no se hizo esperar
"Vean! Vean! el hada del océano ha sido capturada por mi y yo les permitiré verla por un precio bajísimo... no pierda esta oportunidad!"
"Lynn..." murmuró Zach mientras corría a ver...

Una hermosa muchacha de cabellos azules y ojos aguamarina estaba sentada abrazando las rodillas, se veía aterrada. Las estrellas de mar que decoraban su cabello, antes de un color blanco brillante, se encontraban ahora amarillentas; el collar de pequeñas conchas y perlas que Lynn solía usar ya no estaba sobre su cuello, Zach supuso que ese desgraciado lo habría vendido; finalmente el vestido celeste que usaba Lynn se veía raído y brillo... no era ni la sombra de lo que era antes... "Lynn... mi pobre Lynn..."

"No quiero que me vean, no quiero, no quiero!" sollozaba la joven y sus sollozos alimentaban el morbo de todos los asistentes que tiraban toda clase de cosas dentro de la jaula en donde se encontraba la ninfa, para obligarla a hacer algún truco... "Si yo no quiero que me vean, entonces ellos no pueden verme... no pueden... y yo no quiero que me vean" seguía sollozando la muchacha. Zach no pudo evitar llorar al verla en ese estado, Lynn le había contado que sólo podía ser visible a los mortales si ella así lo deseaba... pero al parecer sus poderes ya no servían...
De pronto los ojos aguamarina de la muchacha se clavaron en los ojos grises de Zach y por primera vez en mucho tiempo ella esbozó una sonrisa: "Zach..."

Él la miró anonadado por unos momentos, de pronto una voz en su cabeza susurró: "Agua de mar... la necesito... ayúdame Zach... no quiero que me vean... no quiero... sólo quiero que tú puedas verme...."

Así que era eso! él miró a Lynn y sonrió... casi instantáneamente salió corriendo, con Gabriel detrás de él...

"Qué intentas hacer?" gritó el niño
"Algo por el ser que amo!" respondió Zach con convicción mientras subía a su auto, el mar no estaba lejos... aún podía hacer algo por ella... tal vez, incluso podría estar con ella para siempre...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo sè cuàl es el argumento la historia de donde sale este fragmento, y por eso puedo ubicarlo mejor. Pero aunque no lo supiera, el fragmento tendrìa sentido, serìa un todo en si mismo. Claro que se notaria que alude a una historia mayor, pero eso parecerìa un efecto intencional del narrador. Creo que esa propiedad se alcanza porque la relaciòn entre los personajes està contenida con bastante intensidad, vivacidad. Ademàs que es muy buena la manera en que decribes la situacion de Lynn, lo indefensa que està.

Patty_Mara dijo...

le gusto, aunque me perdi en el principio... pero el final en la segunda leida lo entendi!!! me gusto mucho! hermoso!